Dorsey Rivera René
Iluminación
Grupo 301
Profesor: Carlos
Jiménez
La belleza
Fuente
www.wikipedia.com: Este concepto es estudiado
principalmente por la disciplina filosófica de la estética, pero también es abordado por otras disciplinas como la historia, la sociología y la psicología social. Vulgarmente la belleza se
define como la característica de una cosa que a través de una experiencia sensorial (percepción) procura una sensación de placer o un sentimiento de satisfacción.
La caracterización de una persona como “bella”,
ya sea de forma individual o por consenso de la comunidad, a menudo se basa en
una combinación de belleza
interior, que incluye los factores psicológicos —tales como congruencia,
elegancia, encanto, gracia, integridad, inteligencia, personalidad y simpatía, y belleza exterior,
es decir, atractivo físico, que incluye factores físicos tales como juventud,
medianidad, salud corporal, sensualidad y simetría.
La belleza interior es un concepto usado para describir
los aspectos positivos de algo que no es físicamente observable.
Aunque la mayoría de especies usan
los rasgos físicos y feromonas para atraer a su pareja, algunas personas dicen
confiar en la belleza interior de sus elecciones.
Las cualidades como la amabilidad,
la compasión, la creatividad, la inteligencia, la sensibilidad o la ternura se
han dicho que serían deseables desde la parte emocional, ya que constituyen los
valores que hacen a una persona agradable, buena e interesante en su forma de
ser.
Fuente
http://www.cienciapopular.com: Los estudiosos de la estética y los filósofos aún no se han
puesto de acuerdo en la definición de la belleza. La belleza no se define, se
reconoce. Es una cualidad, un concepto, un sentimiento, que se caracteriza por
su relatividad: no hay un criterio universal a pesar de que existen
aproximaciones a lo absoluto, acercamientos a la perfección que no existe más
que como ideal. Muchos estudiosos consideran que la belleza es lo que resulta
agradable a los sentidos y que por consiguiente causa placer, pero no todo lo
que nos causa placer tiene por qué ser bello. La belleza ha sido objeto de
culto desde que surgió el Homo Sapiens. Por aquel entonces ya empezaban a
decorar sus cuevas, creaban pequeños artilugios que simplemente les servían
para decorar y no tenían otro fin útil. Platón de Atenas (circa 427 a.C. – 347
a.C.) fue un filósofo griego, alumno de Sócrates y maestro de Aristóteles, que
habla de la belleza como el nombre común de las cosas bellas y que tenían una
armonía en sus proporciones por lo se percibía desde un punto de vista
objetivo. Esta percepción de la belleza se siguió manteniendo en la Edad Media.
Concepto Personal: Para mí
la belleza es totalmente abstracta ya que cada uno de nosotros podemos ver la
belleza de diferente manera, en estos tiempos la belleza nos la han presentado
con cuerpos esculturales, con personas totalmente plásticas ya que siempre nos muestran
la belleza externa con modelos con cuerpos realmente trabajados, operados,
perdiendo totalmente la forma natural del cuerpo, los medios de comunicación
masivos nos bombardean con comerciales con este tipo de gente pero en contenido
totalmente vacíos, siempre nos muestran como “tenemos” que estar para poder
sobresalir en la vida, dejando a un lado la inteligencia y la belleza interna,
que a mi parecer la belleza interna es lo realmente importante ya que abarca
los valores y sentimientos de las personas, los medios de comunicación masivos
le han presentado a la gente solamente la belleza externa y haciendo ver que la
interna no tiene valor alguno, haciéndonos creer que si nos vemos como los
modelos y gente que nos presentan no seremos felices y no prosperaremos en la
vida, siendo que la belleza externa es lo único que cuenta en la vida.
Por eso
para mí la belleza tanto interna como externa es totalmente abstracta ya que
para algunos la belleza pueden ser los cuerpos esculturales y artificiales y
otro tipo de gente prefiere los cuerpos naturales y no tan trabajados, mientras
que en la belleza interna mucha gente puede ver y aplicar los sentimientos y
valores de un modo distinto a los de las otras personas.
Las Telenovelas
Fuente http://www.eictv.co.cu:
La trascendencia cultural del género telenovela rebasa su
condición de producto comunicativo, utilizado por su éxito en los públicos como
soporte de acciones comerciales con fines persuasivos y mercantiles y se
conecta con profundas matrices culturales e indudables tradiciones de la
narrativa popular. En los productos comunicativos de los nacientes medios
electrónicos masivos, muy especialmente en la radio y la telenovela, se
vertieron, impregnaron y re asimilaron múltiples manifestaciones y productos
generados por las prácticas culturales regionales, portadoras de una peculiar
visión de los aconteceres, los sentimientos y la ficción.
Desde las primeras décadas del Siglo XX, el largo
recorrido del imaginario popular latinoamericano, contó con matrices culturales
portadoras de concepciones, códigos y valores universales que tributaron a la
telenovela. Su recepción es un fenómeno de adecuación del texto televisivo a
las audiencias, pero sobre todo, un encuentro de la gente con relatos cercanos,
que les hablan en un lenguaje conocido y fácilmente identificable sobre valores
y emociones que perviven a través del tiempo. Solo eso bastaría para explicar
el hecho de que públicos diametralmente opuestos en tradiciones históricas,
sociales y culturales, los prefieran.
La telenovela latinoamericana es una monumental y
compleja matriz cultural que involucra, dialécticamente, otras de gran arraigo
en los públicos y posicionamiento en el mercado como el folletín europeo, el
melodrama, el cine, la soap
opera, la radionovela, la historieta y hasta las lecturas de tabaquerías y
la saga de Corín Tellado, que al fundirse a las estrategias propias de su
lógica comercial, ha generado que sea aun hoy una de las formas narrativas de
la ficción audiovisual preferida por los públicos, pese a las nuevas
tecnologías de la información y las comunicaciones del siglo XXI.
Una de las estrategias más recurrentes en la
trayectoria de producción y realización de telenovelas ha sido el reciclaje o
reconversión perenne de las historias provenientes de otros medios y ámbitos de
la industria cultural. Para Fadul (1995), la práctica de rehacer antiguos
montajes teatrales o producciones cinematográficas es una especificidad del
género ficcional que también aparece en la evolución histórica de la
telenovela.
La realización de versiones de historias escritas
para otros medios y soportes culturales, el renombrado remake anglosajón, usa como ventaja
competitiva historias ya probadas y aceptadas por los públicos, que se han
mantenido en la memoria colectiva y que se retoman en nuevas adaptaciones, con
audiencias y aceptación aseguradas, sobre todo en las generaciones que
disfrutaron las historias originales, las cuales transmiten sus vivencias y percepciones
a las posteriores. El proceso es consustancial a los orígenes de los productos
culturales continentales, y adquirió connotaciones especiales desde la soap televisiva estadounidense y la
telenovela cubana de la década del 50, generalizándose como tendencia en
América Latina, donde constituye ya una práctica continuada por más de cinco
décadas.
Les proponemos un acercamiento al flujo de las
historias de amor ficcional a partir de la trayectoria de las telenovelas
realizadas y difundidas en México hasta el año 2000, uno de los ejes analizados
en mi tesis de maestría en Ciencias de la Comunicación en la Facultad de
Comunicación en la Universidad de La Habana, titulada Enigmas de la Telenovela:
Estrategias de Marketing y de Comunicación Comercial de la Telenovela mexicana.
Entre otros aspectos, observamos el predominio de variantes fundamentales en la
selección de las fuentes de las historias producidas y transmitidas en ese
país.
Sin pecar de absolutos, la producción de Telenovelas
no históricas en México, pese a la diversidad de televisoras involucradas,
desde la pionera, Senda
prohibida, adopta como tendencia fundamental el retomar las provenientes de
otros medios y soportes de la Iidustria cultural regional, evidenciada desde
sus primeros dramatizados y posteriormente en la telenovela. Con el paso del
tiempo, se le ha sumado el reciclaje continuo y variado de historias
televisivas exitosas propias o no.
Mayra Cue Sierra es especialista del Centro de
Estudios de la Televisión Cubana. El presente es un fragmento de su tesis de
maestría en Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Comunicación de la
Universidad de La Habana, Enigmas de la Telenovela: Estrategias de Marketing y de
Comunicación Comercial de la Telenovela mexicana.
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